Principales cuidados que deben tener las personas en grupo de riesgo ante el frío

El invierno es la estación más dura para los lactantes, niños, mayores e inmunosuprimidos entre otros, ayer la mínima descendió a 3ºC y de no cuidarse, pueden padecer muchas enfermedades.

El frío puede ser el peor enemigo para las personas que se encuentras incluidas dentro de los grupos de riesgo, que son los más vulnerables y por lo tanto sufren mayor mayor riesgo, estos son:
Los niños menores de 5 años y más aún los menores de 1 año, niños, adolescentes, personas con enfermedades crónicas y adultos mayores de 60 años.

Cuidarlos bien es la única forma de eliminar la posibilidad de que estos padezcan enfermedades derivadas de las bajas temperaturas, así que desde comuna13online brindamos algunos consejos para cuidados de estas personas en invierno y éste no sea sinónimo de peligro para quienes tenemos cerca.

  • El primer consejo que podemos dar es vacunarse, la vacuna contra la gripe reduce hasta un 75% su aparición y disminuye un 70% las posibilidades de hospitalización.
  • Crear en casa un espacio bien climatizado, procura no tener las ventanas abiertas durante demasiado tiempo.
  • Vestir siempre con ropa de abrigo adecuada. Siempre es importante que tengan los pies abrigados, además de una bufanda, gorros y guantes que actúen como barrera para el frío.
  • Por supuesto, un buen sistema de calefacción se hace fundamental durante los días más fríos del año.
  • Una buena alimentación: alimentos como frutas y verduras ricas en vitamina C y proteínas varias, pero bajas en grasa y con el aporte calórico necesario.
  • Consumir comidas calientes, por ejemplo sopa, un vaso de leche caliente… para que “el cuerpo entre en calor” antes de acostarse a dormir.
  • Es importante hidratarse bien. Aunque con el frío la sensación de sed disminuirá considerablemente, tu cuerpo seguirá necesitando hidratarse y beber, ya que el clima puede resecar la piel, generar la aparición de ronchas. Lo ideal es beber al menos 2 litros de líquido diario.
  • Evitar los cambios bruscos de temperatura.

Es recomendable salir a caminar, al contrario que en verano, las mejor hora para salir es al medio día; además, salir a pasear te permitirá respirar aire puro y tener menor riesgo de contagio de gripe o catarro, además es muy beneficioso para la circulación,  el frío frena la circulación de la sangre y pone en grave peligro a las personas que sufren isquemias y otros problemas del corazón.

Otro aspecto importante es evitar contagios, si hay personas enfermas en la casa es recomendable ventilar, el lavado de manos es otro punto importante ya que previene infecciones y debe realizarse varias veces al día.

Enfermedades más comunes durante épocas de frío

Gripe

También conocida como influenza, es una enfermedad causada por un virus. Se caracteriza por presentarse como una infección respiratoria aguda muy contagiosa. Puede afectar a personas de todas las edades, pero es más peligrosa en personas con enfermedades respiratorias, niños menores de 5 años y en adultos de 65 años y más.

El virus de influenza tiene una gran variabilidad genética, por lo que nunca confiere inmunidad permanente. Así, es necesario vacunarse todos los años, especialmente en los grupos vulnerables. La gripe, además de generar riesgo de hospitalización e incluso de muerte, puede derivar en una neumonía viral y/o bacteriana.

La transmisión la mayoría de las veces se produce por vía aérea, aunque también puede transmitirse por contacto con superficies contaminadas. Las personas enfermas, al toser, hablar o estornudar, expulsan el virus, que puede permanecer activo durante horas en un ambiente frío y con poca humedad. Por esto, la transmisión aumenta en lugares cerrados con gran concentración de personas.

Los síntomas por lo general aparecen en la semana de haberse contagiado, de forma repentina. Los más comunes son:

  • Fiebre
  • Dolores en el cuerpo
  • Estornudos
  • Escalofríos
  • Mareos, náuseas y vómitos
  • Dolor de cabeza
  • Falta de energía

Neumonía

Al igual que la gripe, es una infección aguda pulmonar que puede ser provocada por bacterias o virus en la mayoría de los casos. Por lo general, parte del diagnóstico involucra una radiografía de tórax para observar el estado de los pulmones.

En general es un proceso de curso benigno, pero ocasionalmente puede evolucionar hacia una enfermedad grave. Las personas mayores de 65 años son el grupo más afectado por la enfermedad y el que más veces deriva en formas graves. La mayoría de los pacientes puede atenderse en forma ambulatoria, y entre los hospitalizados un pequeño porcentaje puede necesitar cuidados intensivos.

Los síntomas más comunes incluyen:

  • Tos
  • Fiebre
  • Dificultad para respirar
  • Dolor de cabeza
  • Inapetencia y baja energía

Resfrío común

El resfrío es producido por distintos virus y su evolución natural es hacia la curación, que puede tardar más de una semana.

Los síntomas iniciales, que aparecen tras dos a cinco días de incubación, incluyen:

  • Congestión nasal
  • Irritación de la garganta
  • Fiebre
  • Tos
  • Estornudos

Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC)

Si bien no aumenta su frecuencia con el frío, las personas que la padecen suelen sufrir períodos más intensos en otoño e invierno.

Se define como EPOC a la presencia de una obstrucción al flujo aéreo crónica, progresiva y poco reversible. Está directamente ligada al tabaquismo y es una de las patologías que más se asocian a la neumonía del adulto. Los tipos principales de EPOC son la bronquitis crónica y el enfisema.

Los síntomas más comunes son:

  • Tos persistente o que produce mucha mucosidad
  • Sensación de falta de aire, especialmente durante la actividad física
  • Sibilancias (silbidos o chillidos al respirar)
  • Presión en el pecho

Ante la aparición de síntomas es aconsejable dirigirse al Centros de Salud o guardia hospitalaria más cercana.

Cubrirse la boca, la nariz al toser y estornudar con el antebrazo, nunca con la mano ya que podemos propagar el virus con el tacto.