La Ciudad busca reabrir shoppings y la vuelta del personal doméstico

Son algunas de las medidas que el Gobierno porteño propondrá al Gobierno nacional para continuar con el Plan de puesta en marcha integral y gradual de la Ciudad.

.

En el caso del personal doméstico no podría utilizar medios de transporte público y faltan precisiones sobre si podrán o no trabajar quienes residan fuera del ámbito porteño.

Esta actividad sufre las consecuencias de la pandemia desde el prtincipios del aspo, en mayo hubo casi 20.000 trabajadores menos respecto de marzo con aportes registrados a la Seguridad Social, según los registros del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) publicados en su momento por el Ministerio de Trabajo de la Nación. Y, de acuerdo a un estudio elaborado por la Universidad de Lanús y el Consejo Nacional de Investigaciones, Científicas y Técnicas (Conicet), solo el 33,1% de 635 empleadas que respondieron a una encuesta recibió el salario abonado por sus empleadores aun cuando no podían trabajar por la cuarentena, en tanto más de la mitad vio empeorada su situación laboral durante el mismo período.

En tanto, desde los shoppings aseguran estar listos para reabrir sus puertas. El ministro de Desarrollo Económico y Producción porteño, José Luis Giusti, estuvo la semana pasada recorriendo las instalaciones de Abasto Shopping para verificar las medidas sanitarias dispuestas: alfombras desinfectantes, cámaras que detectan la temperatura, alcohol en gel distribuido y cartelería donde se indica la cantidad de gente que, como máximo, debe permanecer en cada local. Días después de la visita del funcionario, una caravana de comerciantes se manifestó para pedir la pronta reapertura de los centros comerciales.

Si bien se divulgó sobre la posibilidad de que se avanzara estos días con el proyecto de apertura de los salones cerrados de los bares y restaurantes, desde el Gobierno porteño indicaron que «no por el momento», aunque no desestimaron que pueda ocurrir en las semanas subsiguientes.

Ariel Amoroso, presidente de la Asociación de Hoteles, Restaurantes, Confiterías y Cafés (Ahrcc), dijo a La Nación que «creemos que en la Ciudad ya están dadas las condiciones para poder permitir clientes en los salones internos de los locales con un aforo del 50%». Y siguió: «Después del primer día de apertura al aire libre, que fue un poco desorganizado, luego se pudo mejorar y la gente pudo entenderlo también».

Según el titular de la cámara gastronómica, 1500 restaurantes y bares cerraron sus puertas de manera definitiva tras decretarse la cuarentena. «Pero podría haber más si no damos ese paso para habilitar mesas en los interiores y si el Gobierno no continúa con su asistencia con la Asistencia para el Trabajo y Producción (ATP) y la exención del pago de Ingresos Brutos hasta marzo», agregó.

Respecto de la apertura de los gimnasios, aún no hay a la vista una fecha estimativa de cuándo podría tratarse el tema. Según Fernando Storchi, titular de la Cámara Argentina de Gimnasios, ya cerraron definitivamente unos 1000 establecimientos de un total de 8000 que operaban en el país antes de la pandemia.